viernes, 25 de diciembre de 2009

El Verdadero Significado de la Navidad


Un día como hoy 25 de diciembre, se conmemora el nacimiento de Jesús, El Hijo de Dios; Dios mismo hecho hombre. La fecha de su nacimiento ha sido por mucho tiempo, tema de debate. Lo importante aquí radica en el hecho de a que fue que Dios mando a su hijo unigénito en medio de una generación que estaba perdida. Más aun, en Filipenses 2: 5-9, nos dice ,” 5Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, 6el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, 7sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; 8y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.” Así, que vemos el propósito de Dios, en un momento de la historia, Él decide vivir con nosotros para comprender lo que el hombre vivía en carne propia. Pero Él, superó las expectativas del hombre común, y se dio en sacrificio de amor por nosotros para abrirnos el camino por Cristo Jesús  a su morada celestial. En el Viejo Testamento, se anuncia su nacimiento, Isaías 7:14, da fe de ello,” Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel.” En el Nuevo Testamento, relata ese acontecimiento en Mateos 1:18-23,” 18El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. 19José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. 20Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es. 21Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados. 22Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el Señor por medio del profeta, cuando dijo:
23He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo,
Y llamarás su nombre Emanuel,
que traducido es: Dios con nosotros.”
En Isaías 9:6, Dios nos adelanta su identidad entre nosotros,” Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.” Pero va mas allá, cuando en Juan 14:8-10, nos confirma lo que ya había anunciado en Isaías 9:6, “Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta.     9 Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?
    10 ¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras.” De manera, que Dios cumplió su palabra de su visita en Cristo Jesús, anunciándose con mucha anticipación, abriendo con su infinito amor un nuevo camino hacia su Gloria, con la ofrenda de su propia vida en Jesús. Al Él sea toda la Gloria y el Honor por los siglos de los siglos.


2 comentarios:

  1. Dios le bendiga, gracias a Dios por la salvación.

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  2. Dicho como todo un catacumbero con mucha palabra de Dios. Amen que si. Gloria en las alturas!!!

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